De abyectos políticos a sujetos políticos

22 de junio de 2009

En su bitácora de Internet, Roberto Gargarella cuenta que participó en la edición de este año del Seminario Latinoamericano que organiza la Universidad de Yale (que se realizó en Asunción, Paraguay) donde se discutió el tema sexo y derecho. RG destaca la ponencia de Kenji Yoshino, estudioso de derecho constitucional, antidiscriminatorio y derecho y literatura, Chief Justice Earl Warren Professor of Constitutional Law de NYU. En su ponencia, KJ habla del tránsito desde el armario judicial hacia el altar legislativo, esto es, del tránsito que se ha recorrido del litigio judicial de los derechos de los homosexuales a sus reclamos para que los legisladores modifiquen las normas jurídicas que los discriminan (en particular, con relación a sus reclamos para que se reconozca legalmente el matrimonio homosexual –el que, en Estados Unidos se lo reconoce en seis Estados –v. acá). De manera interesante, KJ correlacionó ese tránsito desde el litigio hacia la legislación con la evolución desde polítical abjects (“abyectos políticos”) hacia political subjects (“sujetos políticos”). Hay mucho, mucho para debatir a partir de esos conceptos (para artículos de KJ, que los hay muchos e interesantes, visítese su ciberpágina).

Hay mucho, por ejemplo, para debatir en el ámbito local, que ha recorrido ese mismo tránsito: desde la criminalización de la homosexualidad (1) al litigio judicial de sus derechos ante el Tribunal Constitucional que concluyó con la resolución No 106-1-97 que declaró la inconstitucionalidad del artículo 516 del Código Penal que criminalizaba esa conducta (2) hasta su reconocimiento en las normas jurídicas, primero, en el texto constitucional de 1998 (3) y diez años después, con mayor detalle y con una lucha más visible, en el texto constitucional de 2008 (4) y en la legislación sobre crímenes de odio (5). Este tránsito desde lo prohibido penalmente hacia lo aceptado constitucionalmente refleja el tránsito desde el “abyecto político” hacia el “sujeto político” y refleja, entonces, que al día de hoy la comunidad GLBTT puede formular sus propuestas políticas y que otros sujetos políticos pueden tomárselas en serio (6) sin merecer quienes las formulan el ostracismo al que la sociedad que se presume a sí misma de “normal” (7) los había condenado y al que ellos mismos contribuían (y, en la práctica, todavía contribuyen) al mantenerse en el closet.

Un reflejo de ese tránsito se lo obtiene con la lectura de dos ediciones de la revista Vanguardia y con el devenir de una celebración. Lo primero: la edición No 20 (7-13 de febrero de 2006) de revista Vanguardia publicó un artículo que empezaba con la afirmación de que desde la despenalización de la homosexualidad en 1998 los grupos GLBTT “tienen más visibilidad, pero todavía están lejos de una verdadera integración en la sociedad. Los perjuicios y los guetos persisten” y en recuadro destacaba que “en Guayaquil no hay marcha del Orgullo Gay desde el 2002. El Municipio no la ha autorizado” porque, explica la revista, “la visibilidad recientemente adquirida por los grupos GLBT ni siquiera les garantiza la libertad de manifestación pública. No en Guayaquil, donde la marcha del orgullo gay, celebración anual mundial, ha estado prohibida por el Municipio desde el año 2002. ¿Seguirá estándolo en el 2006?”. Lo estuvo. La revista expuso el que se supone el punto de vista del Alcalde: “Jaime Nebot respeta a los homosexuales, a las lesbianas y a los derechos humanos, pero ni una palabra sobre la marcha”. (Para esa época, yo inquirí sobre la marcha del Orgullo Gay, acá). La edición de la semana anterior de revista Vanguardia (No 193, 16-22 de junio de 2009) analiza de nuevo el tema, con un artículo cuyo título es decidor: “El Orgullo Gay gana más espacios”. El artículo destaca que en Guayaquil todavía no respeta el derecho a la no discriminación en esta materia (como en tantas otras) porque “en el Puerto Principal [los espacios de las comunidades GLBT] son clausurados constantemente por supuestos daños a la moral” y revela la diferente actitud que tienen las autoridades de Quito, porque “[e]n el 2008 la alcaldía del Distrito Metropolitano creó una ordenanza para incluir en las políticas municipales la perspectiva del reconocimiento de los derechos GLBT. Convocó a grupos de esa comunidad para crear una agenda de trabajo a través de la Comisión de Equidad Social y Género. Además auspicia las actividades de la semana del Orgullo Gay. La marcha emblemática del 28 de junio se realiza en la ciudad desde el 2000. Y a partir del año pasado el Ministerio de Cultura y la Prefectura de Pichincha se sumaron a la organización de las celebraciones” mientras que, enfatiza la revista, “Guayaquil está en las antípodas. Apenas el año pasado el Municipio autorizó la celebración del Orgullo Gay. Cerca de 5.000 personas marcharon por la Av. Francisco de Orellana. Pero este año quieren ocupar espacios importantes de la ciudad: van a ir por el Malecón, subir por la Nueve de Octubre y hacer su festival en el Parque Centenario. Cuentan con el respaldo del Ministerio de Justicia, la Intendencia y la Defensoría del Pueblo”. (v. vídeo, acá). El reconocimiento como sujetos políticos de los grupos GLBTT se evidencia con las políticas públicas que se han adoptado en Quito; ese reconocimiento, en Guayaquil, sucede a pesar de las políticas públicas represivas del Municipio local y obtiene cada vez más espacio y visibilidad: menos no podría esperarse (sí mucho más) si nos tomamos mínimamente en serio el derecho a la no discriminación y el derecho de todo individuo al libre desarrollo de su personalidad porque, convengamos, los miembros de la comunidad GLBTT no son más ni menos que otros, ni mejores ni peores: son ciudadanos que merecen el reconocimiento de su individualidad en una sociedad democrática, tanto como usted o como yo. Porque, como expresa Paula Viturro: “Una sociedad se revela democrática no sólo por su sistema de gobierno, sino también por su capacidad de aceptar o no las identidades de género de los demás y los modos de ejercer públicamente las sexualidades”.

Volvamos a Kenji Yoshino, quien ilustró su presentación en el Seminario Latinoamericano con un vídeo que pone el acento, no en los análisis de los derechos ni en la teoría, sino en el plano humano, que nos permite salir de nuestra torre de marfil y visualizar al otro como un igual: ese es el plano que, en el marco de la convivencia social, hace la diferencia:

(1) El artículo 516 del Código Penal, inciso primero, establecía: “En los casos de homosexualismo, que no constituyan violación, los dos correos serán reprimidos con reclusión mayor de cuatro a ocho años”.
(2) La resolución No 106-1-97, acá. Nótese, a pesar de la declaratoria de inconstitucionalidad, el sesgo discriminador que manifiesta.
(3) La Constitución de 1998 establecía en su artículo 23 numeral 3 “[l]a igualdad ante la ley. Todas las personas serán consideradas iguales y gozarán de los mismos derechos, libertades y oportunidades, sin discriminación en razón de […] orientación sexual […] y en su artículo 23 numeral 25 “[e]l derecho a tomar decisiones libres y responsables sobre su vida sexual”.
(4) La Constitución de 2008 establece en su artículo 66 numeral 9 “[e]l derecho a tomar decisiones libres, informadas, voluntarias y responsables sobre su sexualidad, y su vida y orientación sexual. El Estado promoverá el acceso a los medios necesarios para que estas decisiones se den en condiciones seguras” y, más importante, en su artículo 68 establece que “[l]a unión libre y monogámica entre dos personas libres de vínculo matrimonial que formen un hogar de hecho, por el lapso y por las condiciones y circunstancias que señale la ley, generará los mismos derechos y obligaciones que tienen las familias constituidas mediante matrimonio. La adopción corresponderá sólo a parejas de distinto sexo”.
(5) Como puede observarse en esta nota que publiqué acá.
(6) Aunque hay gente pa´ todo, v. los pastores Balerio Estacio y Francisco Loor, acá.
(7) WTF?

14 comentarios:

León Sierra dijo...

Excelente y bien documentado articulo, Xavier.

Muchas gracias

martin romaña dijo...

Ya es hora que ese reconocimiento sea Ni siquiera eso... Es decir, quienes y con que derecho los reconocen?... Acaso los heterosexuales necesitan ser reconocidos?... Lo que quiero decir es que debemos pasar de ese punto (sin lugar a dudas es necesarísimo en estos momentos casi medievales en algunos temas como este) en el que la sociedad "normal" termina por aceptar y reconocer las "anormalidades"... Quiero aclarar por si acaso... Digo que como en el caso de la participación igualitaria de las mujeres y hombres en política electoral, a mi no me gusta que haya la obligación legal, me parece que ya hay discrimen cuando se les "acepta" por obligación en los ámbitos "masculinos"... Lo mismo me parece con el tema de los derechos de los grupos GLBT... Ellos deben tener los mismos derechos y deberes que los demás, sin ni siquiera detenernos a pensar un segundo en su preferencia sexual... Es como cuando una persona se jacta de NO-ser racista, como si ese fuera un gran mérito per-se... De acuerdo que en una sociedad muchas veces cavernaria (para ejemplo lo que informas sobre el macho alcalde guayaquileño) RECONOCER desde la legalidad todas estas "anormalidades" en un súper avance, pero creo que eso solo debe ser el inicio...

Saludos y felicitaciones.

Pocoyo dijo...

En el mundo de las libertades, aquellos que se deleitan y comparten aberraciones, tienen derecho a ejercerlas. No hay pleito.

De igual manera, en honor a dichas libertades, las cosas deben ser llamadas por su nombre, sin tapujos ni miramientos de corte tipo censura, como aquellas demandadas abstenciones verbales conocidas como actitudes "políticamente correctas".

La orientación sexual de la humanidad es heterosexual en forma mayoritaria, la norma, es decir, todo lo que se cobija debajo de las 2 desviaciones estándar tanto a la derecha como la izquierda, es la que predomina. Por lo tanto, todo aquello que se enmarca fuera de la norma debe tildárselo de anormal.

La homosexualidad es por lo tanto una anormalidad. No obstante, quien la practique o se suscriba a ella no merece discriminación, mas si igualdad de derechos, sin privilegios por ser una "minoría", por mas anormal que se sea. Los activistas heterosexuales de estos derechos pueden ser considerados unos decadentistas, en la totalidad de la primera acepción del vocablo y en la parte final de la segunda acepción del mismo, adaptando todo al siglo XXI.

DRAE:

decadentismo.

1. m. Tendencia de algunos escritores y artistas de fines del XIX y principios del XX, que afirman su personalidad en la sociedad tratando temas artificiosos con afectado refinamiento.

2.m. Tendencia estética de fines del siglo XIX caracterizada por el cultivo del arte como fin en sí mismo y el gusto por las formas exquisitamente refinadas, con desdén de las convenciones burguesas.

martin romaña dijo...

No estoy de acuerdo contigo, estimado Pocoyo. No coincido en denominar anormal a una forma de concebir la sexualidad propia, solo por ser minoritaria en cifras oficiales. Más que nada por la connotación que tiene la palabra anormal... Para mi son perfectamente normales, y la anormal, en el sentido despectivo del término, es la sociedad que se cree con derecho a discriminarlos, a satanizarlos, a perseguirlos, a tolerarlos, como si se tratara de algo para tolerarse, de entenderlos, de aceptarlos... Nunca he visto un debate que se centre en la decisión mayoritaria de aceptar y comprender a los heterosexuales...
Saludos

martin romaña dijo...

Y me olvidaba, disculpas por ello. Puedes por favor, explicarme un poco mejor y sin "expresiones políticamente correctas" a qué te refiere cuando dices : "En el mundo de las libertades, aquellos que se deleitan y comparten aberraciones, tienen derecho a ejercerlas. No hay pleito."

Especialmente la parte de las aberraciones. Gracias. Y saludos de nuevo.

León Sierra dijo...

Al Pocoyo:

Hay ciertas normas internacionales de ética cibernauta que se deben empezar a emplear:

Ser un atento comentarista de un blog como éste, no te da licencia para ir a otro (el mío) y lanzar una larga verborrea fascista y esconderte en el anonimato de un nick hasta poco inventivo: pocoTÚ, tu pocoyo.

Nada más. Sabes que si tuviese tu identidad te podría meter un pleito judicial por injuria, felizmente, esta chapuza de constitución que aprobamos me ampara. Al margen de eso, si quieres dirimir en la lid del anonimato, dame cancha para escupirte un poco en tu casa, estoy dispuesto, ¿ok?

(Perdona Xavier, pero este individuo se ha lanzado a comentarme humillantemente en mi blog... He borrado, obviamente, la basura de sus palabras)

Pocoyo dijo...

Romaña:

"En el mundo de las libertades, aquellos que se deleitan y comparten aberraciones, tienen derecho a ejercerlas. No hay pleito." Dije yo.

Te explico de una manera menos eufemística: si tu disfrutas de, por ejemplo, comer kaka, ese es tu problema, tu derecho y tu prerrogativa. No hay bronca con ello. O sea, mientras te lo reserves para vos y aquellos que compartan tus gustos culinarios, no hay pleito. ¿Por qué convertirlo en una causa o agenda particular para la cual se solicitan adhesiones, respaldos y suscripciones?

Sierra... serrucho de cacha floja: sería bueno que publiques lo que escribí en tu mundito de juguete y deja que otros juzguen. Tu te las das de irreverente. ¿Acaso crees que por tu "condición" tienes el derecho de hablar de la manera que te da la gana, pero otros que no son de tu "condición" no lo pueden hacer en similares términos? ¿Comentar de manera somera lo que se puede percibir de tu persona es digno de un juicio por injuria? ¿Con qué sustentarías tu demanda?

DRAE: Injuria.

(Del lat. iniurĭa).

1. f. Agravio, ultraje de obra o de palabra.

2. f. Hecho o dicho contra razón y justicia.

3. f. Daño o incomodidad que causa algo.

4. f. Der. Delito o falta consistente en la imputación a alguien de un hecho o cualidad en menoscabo de su fama o estimación.

En tus propias palabras: eres "marica" , "te drogas" y "hay que drogarse"... ¿de qué manera se ha menoscabado tu bien ganada fama o estimación? ¿no han sido mis palabras, mas bien un ensalzamiento de tu autoreconocida fama?

Me he burlado de tu remedo de monólogo de la vagina al cual he tildado "circunloquio del coño-wanna be" ¿Te molestó tanto? Te reto a que publiques en tu blog lo que escribí, si tienes la decencia, (me abstengo de usar la palabra hombría) honestidad intelectual y no te embarga la intolerancia.

martin romaña dijo...

Xavier: gracias por no impedir esta conversación, muy a pesar de que me imagino que a veces debes contar hasta bastante más que 10, al leer ciertas cosas... Saludos

Pocoyo: gracias por responder. Trataré de ir preguntándote o expresando lo que me generan tus expresiones, conforme llegue a ellas, y para eso me veo obligado a citarte y separaré tus ideas de las mias con puntos suspensivos y paréntesis para que se entienda más fácilmente:

"Te explico de una manera menos eufemística: si tu disfrutas de, por ejemplo, comer kaka"....... (Empiezo por decirte que dada la seriedad que según yo merece el tema, tu ejemplo es pésimo... Siempre a mi humilde criterio)...

"...ese es tu problema, tu derecho y tu prerrogativa"....... (completa y absolutamente de acuerdo con esta oración)....

"...No hay bronca con ello. O sea, mientras te lo reserves para vos y aquellos que compartan tus gustos culinarios, no hay pleito..." (entiendo, pero insisto en lo burdo del ejemplo)...............

"...¿Por qué convertirlo en una causa o agenda particular para la cual se solicitan adhesiones, respaldos y suscripciones?..."

1.- ¿Estás diciendo que la homosexualidad es una aberración?... Si es así, empezamos con el desacuerdo que anula toda la conversación, pues tu premisa no la comparto desde ningún punto de vista, ni retrocediendo mi pensamiento unas décadas, o siglos, ni haciendo el esfuerzo de ponerme en tu lugar.
Pero asumiendo que no es así, y que entendí mal, solo puedo esperar la respuesta y ahi recién volver a comentar.

2.- Tu preguntas "¿Por qué convertirlo en una causa o agenda particular para la cual se solicitan adhesiones, respaldos y suscripciones?" Y yo puedo responder en base a la misma libertad que anuncias en la primera parte de tu comentario, es decir, por la libertad de hacerlo mientras no se haga daño a nadie con ello... El único lío (y ahí mi malestar con la "libertad" que defienden algunos) es que no todas las personas tienen los medios para convertir una causa o agenda particular en algo para lo cual se soliciten adhesiones, respaldos y suscripciones, tal como lo hacen por ejemplo, "nuestros" consorcios mediáticos con el "modus vivendi" y las "costumbres" que nos pretenden convertir en simples consumidores...

Me pregunto cual es el problema con la homosexualidad, tienes algún problema, aparte de considerarlo "anormal", como lo has dicho antes, y para considerarlo una aberración, si es que entendí bien lo que antes dices.

Si es que un día resulta que los homosexuales empiezan a ser mayoría, ¿estaría bien que ellos consideracen a los heteros como anormales, y que empecemos a pensar si decirnos en voz alta heteros o si lo ocultamos por no ser "mal vistos" por los "normales"?...

¿lo has pensado?, o es que piensas que las "leyes naturales" (¿divinas?) impedirán que un día la mayoría esté en el otro lado?...

Espero tus respuestas, gracias...
Saludos

Saludos

León Sierra dijo...

En fin... Dialéctica de playmobil-he man, no me interesa. Aunque saques el DRAE o la enciclopedia británica.

Yo me digo marica, yo sí, antes de que tú exprimas tus neuronas para escupir un par de esputos gamaticalmente bien hechos. Con esto pongo punto final.

Y si vuelves a comentar como anónimo en mi blog, te vuelvo a borrar: porque me sale del coño, de mi coño wannabe.

Nuada Citlali dijo...

Hola Xavier, creo que se te ha pasado por alto poner el link: (Para esa época, yo inquirí sobre la marcha del Orgullo Gay, acá).

Pocoyo dijo...

Agradeciendo por el epacio cedido a petición de Romaña, pasaré a contestar a sus inquietudes.

Romaña:

Aclaré bien clarito, que iba a prescindir de los eufemismos. Use un ejemplo burdo, pero fácil de entender. Prueba de ellos, es que lo has entendido casi completamente bien. Digo casi, pues al yo aclarar que los eufemismos iban a ser eliminados, lo ofensivo del ejemplo no era el "core" del asunto, sino la idea detrás del mismo. No captaste eso. La seriedad del tema está en los ojos de quien lo aprecia. Para tí, puede que sea un tema sombrío, seco, pastoso y demasiado importante, para mi, es una cuestión de opinión "light", hay temas que me preocupan mas, como la caza de ballenas o la muerte de Michael Jackson.

¿Por qué convertirlo (al homosexualismo) en una causa o agenda particular para la cual se solicitan adhesiones, respaldos y suscripciones? Yo he preguntado. Tu me respondes con otra pregunta. ¿Me puedes decir de una buena vez el porqué?

Así como para vos, la homosexualidad es lo mas cool del mundo, y algo "natural", para mí es una aberración y algo anormal (pues se sale de la norma.) Tu no compartes mi premisa. Ok. Pero decir que mi postura anula la conversación, solo desdice de ti y de tu grado de tolerancia. ¿Puedes demostrar tolerancia por quienes seguimos pensando de manera mas conservadora o diferente a ti? ¿Puedes dejar de implicar que merecemos ser condenados por no pensar y cambiar nuestras mentalidades al gusto de los noveleros modernos? Para tí pensar como yo respecto a la homosexualidad puede que sea retrógrado, para mí es al revés. A la historia de la humanidad me remito.

El desacuerdo, es mas bien lo que permite que este tema desemboque en una conversación y evite que éste, -el tema- y las participaciones de la gente en el foro, no sean meros salmos responsoriales. Mi postura, es precisamente la que permite que este tema sea un debate o diálogo, y no una sesión de corifeos o un coro de adulones que se identifican con las palabras del autor.

DRAE:
aberración

(Del lat. cient. aberratio, -onis).

1. f. Grave error del entendimiento.
2. f. Acto o conducta depravados, perversos, o que se apartan de lo aceptado como lícito.
3. f. Astr. Desvío aparente de los astros, resultante de la combinación de la velocidad de la luz con la de los movimientos de la Tierra.
4. f. Biol. Desviación del tipo normal que en determinados casos experimenta un carácter morfológico o fisiológico.
5. f. Ópt. Imperfección de un sistema óptico que produce una imagen defectuosa.

Me amparo en las acepciones 1, 2, y 4 del vocablo aberración.

Si un día los homosexuales pasasen a ser mayoría, los heterosexuales serían discriminados. Pobre opinión de los homosexuales la tuya, pues demuestra que ellos posiblemente actuarían de similar forma a lo que critican y condenan. Pero además, debo recordar que las sociedades antiguas, como la griega o la romana, para citar un par, deben un gran parte su decadencia y desaparición a la relajación de las costumbres y valores, los mismos que de manera cíclica se reciclan. Los homosexuales y la homosexualidad eran lo justo y necesario, todo lo demás, un adefesio necesario para sostener a la especie. Estamos viviendo una época profundamente decadente, no hay duda, y debes, por lo tanto, tener razón en tus palabras, de acuerdo con los tiempos. No obstante, me sostengo en lo dicho, a pesar de merecer el fuego de las hogueras por tal postura, intolerada por sendos tolerantes.

Sierra: prrrrrrr! A una loca energúmena, enajenada e iracunda es mejor dejarla gritar solita, porque les da por morder y arañar. No pudiste rebatir. Ya te dije que no iba a escribir mas en tu mundito de juguete, no necesitas redundar y abundar en lo mismo.

martin romaña dijo...

Gracias por responder Pocoyo.
A ver, en virtud de la tolerancia que creo Si tener, daré por entendido tus puntos de vista, y respeto que lo hayas dicho y defiendo tu derecho a decirlo. No comparto ninguna de tus ideas, sin embargo...

La pregunta que me haces creo habértela respondido antes, pero por si caso aqui respondo de nuevo. ..... " ¿Por qué convertirlo (al homosexualismo) en una causa o agenda particular para la cual se solicitan adhesiones, respaldos y suscripciones? Yo he preguntado. Tu me respondes con otra pregunta. ¿Me puedes decir de una buena vez el porqué? ..."

La respuesta es que no encuentro un porqué no... Así como los medios (hablando a nombre de sus dueños, y estos hablando a nombre de sus "amigos", y al final, todos hablando desde las conveniencias de sus bolsillos) promueven, defienden, publicitan (con mentiras además) un modo de vida determinado, y evidentemente destinado a convertirnos (no lo somos ya?) en meros consumidores de cosas, meras cosas mejor dicho... De ese modo, amparados en la "libertad de expresión ", los medios hablan por los dueños y hacen lo que tu pides que no hagan los homosexuales con su modo, forma de asumir su propia sexualidad.... MI pregunta más que a ti, es a todos... ¿porqué no?... porqué no pueden hacerlo, porqué no deberían hacerlo?... No hablábamos de la libertad, no son, justamente uds los más acérrimos defensores de las libertades individuales?...

Yo creo que pueden hacerlo si es que quieren hacerlo, no creo que deban, ni que lo necesiten, solo creo que está bien que lo hagan, si es que para ellos está bien hacerlo...

Es más, creo que deberían tener el mismo derecho (en eso consiste la libertad, ¿o no?) que tienen los dueños de los medios y sus amigos de decir lo que quieren, apoyar la forma de vida que quieren, y publicitarlo a gritos y con insistencia enfermiza... (a mentir no creo que tengan derecho, como si lo hacen los medios)

También coincido con tus referencias históricas, pero no con tus interpretaciones de esa historia, en relación al valor en la decadencia de las civilizaciones que tu le otorgas a lo que llamas "relajamiento de los valores" o algo así... Para mi, el problema es la desmedida ambición, y para mi, esa si es una aberración...

El resto la verdad es que es irrefutable, tu piensas que el homosexualismo es anormal y es una aberración, perfecto, respeto y hasta entiendo tu forma de pensar, pero mi criterio es opuesto. No pretendo, ni en mis sueños más imposibles, que tu u otras personas que piensan así, cambien, por eso pienso que es inútil hablar sobre algo que tu no tienes intención de cambiar, ni yo.

No he dicho nada más que eso, al decir que se anulaba la conversación, he querido decir que no le veo futuro a un diálogo en el que ninguna de las partes está dispuesta a negociar sus puntos de vista. Y si en otros casos, ya sería importante decir lo que uno piensa aunque se sepa de antemano que no tendrá resultados prácticos, pues ninguno de los actores está dispuesto a revisar sus premisas, en este caso específico no es así, pues no encuentro sentido en comunicarte a ti cual es mi pensamiento sobre este tema en particular, y dudo que mi pensamiento sobre este tema tenga relevancia, además, creo que ya se cual es tu forma de pensar en este tema, y claro, como para mi eso es ideológico, creo saber cual es tu forma de pensar de manera integral...

No recuerdo haber dicho que los homosexuales, en caso de llegar a ser mayoría, vayan a actuar con las trogloditas (según yo miro las cosas) formas de actuar que han tenido la mayoría de heteros, solo propuse el escenario supuesto, y te preguntaba cómo reaccionarías en ese momento, o qué pensarías de eso de la anormalidad, o qué creerías que se debería hacer si eso sucediera... Sin embargo, también ahora puedes encontrar "razones" para no responderme sobre este particular. También respetaré tu decisión.

Sin más por el momento, y reiterando mi agradecimiento, tanto a ti, por responder, cuanto a Xavier por la paciencia, me despido.

Saludos

amanda dijo...

Pocoyo, si te diría algo, te diría como en la mejor parte del vídeo: "No jodas a mi primo hermano" pero veo que no es necesario el Leòn, es mas que un serrucho un machete.
"Dialéctica de playmobile" jajaja.
Por otro lado hay blogs y blogs, unos importantes y documentados como este en la ciudad, otros hermosos como el diario de cubbie y otros para la pura gana, pero hace falta muy poco para que alguno sea "el mundo" de nadie.

Que pena que el articulo se convierta en esto, no por no que nadie debate, cosa que sucede aquí con frecuencia y seguro no va a faltar. Por suerte èl mejor que otros pocos que tenemos nombre y apellido, lo permite.

Que pena Xavier, era otro el comentario para este articulo tan bueno que justifica la compra del diario, una ovación de pie, las disculpas y un abrazo.

azul dijo...

el trol del diccionario es viejo conocido por aquí. con eso de la anormalidad, las dos desviaciones estándar sexuales, y la caída de roma y grecia por culpa de la mariconada, ya nos ha 'ilustrado' anteriormente, con otro nombre...ah, y con el jueguito de palabra según el cual los open minded son closed-minded de closet...así que perdemos el tiempo parándole bola al dizque promotor de debate.

así que volviendo al post, diré que me recordó algo que leí por ahí sobre la reivindicación de la indiferencia, como principio de convivencia. y me llamó la atención esa reivindicación porque 'indiferencia social' me suena a postura valetrocista de la suerte del vecino y yo con eso no comulgo. pero, a la vez, para quienes tenemos conductas anormales y aberrantes (según el manejador del diccionario aquí arriba), un poco de tratamiento (positiva y sinceramente) indiferente no nos hace mal. e insisto en eso de 'positiva y sinceramente' indiferente porque no lo son aquéllos que dicen sí, es tu prerrogativa y derecho, pero no te exhibas, no hagas ruido, no promuevas causa, ni desfiles...bonito el chiste...

aquí un par de enlaces:

http://weblogs.madrimasd.org/tecnocidanos/archive/2008/02/12/84332.aspx

http://www.tecnologiaparatodos.com.ar/noticias.php?op=sarlo&nota=48881

y un video en portugal

http://www.youtube.com/watch?v=iXw87rsI4Tg

azulete