La Comisión de la Verdad, desde que se la propuso, ha recibido numerosas críticas. La primera de ellas la formuló el difunto Febres-Cordero, quien sostuvo que constituirla violaba la Constitución porque suponía un juzgamiento por un tribunal de excepción. Febres-Cordero se equivocaba, porque el propósito de una comisión de la verdad no es el ejercicio de funciones judiciales ni reemplazar a los tribunales porque, en palabras de Priscilla Hayner, el mandato de estas instituciones es distinto y más amplio, y consiste en analizar “un patrón de acontecimientos, incluidas las causas y consecuencias de la violencia política [lo que] les permite ir mucho más lejos en sus investigaciones y conclusiones de lo que generalmente es posible en cualquier juicio de perpetradores individuales”. Una segunda crítica ha sido la supuesta falta de imparcialidad de los miembros de la Comisión de la Verdad. En realidad, lo importante es que los integrantes de la Comisión de la Verdad sean personas de “reconocida competencia en el campo de los derechos humanos y de intachable condición moral” (así lo establece el artículo 7 del decreto ejecutivo que crea la Comisión de la Verdad) y ese es precisamente el caso de los cuatro miembros que la conforman (Julio César Trujillo, Alberto Luna Tobar, Elsie Monge y Pedro Restrepo). En adición, habría que señalar que la calificación de falta de imparcialidad de los miembros de la comisión ab initio es absurda porque esa calificación podría hacerse de manera fundamentada solamente en la medida en que su informe refleje, eventualmente, esa falta de imparcialidad y el informe no se lo conoce todavía. Una tercera crítica ha sido la justificación de los actos de terrorismo de Estado que presuntamente se cometieron en el período presidencial de Febres-Cordero porque si no habría sido por esos actos no se habría erradicado el terrorismo. Al respecto, conviene precisar que en un sistema democrático el acto legítimo de combatir al terrorismo debe hacérselo dentro del marco legal vigente porque como declaró con guasa George Bernard Shaw, “ciertamente no está bien que los caníbales se coman a los misioneros, pero sí que es mucho peor que los misioneros se coman a los caníbales”. Combatir el terrorismo mediante la violación sistemática de derechos humanos es reprochable y merece sanción.
Finalmente, en días recientes se ha presentado una última crítica referida solicitud de inmunidad de los miembros de la Comisión de la Verdad, la que supuestamente no procede. Habría que recordarles a quienes esto sostienen, que dicha solicitud de inmunidad se encuadra en los presupuestos que en el derecho internacional se han desarrollado para las comisiones de la verdad. En particular, el informe de Naciones Unidas “La cuestión de la impunidad de los autores de violaciones de los derechos humanos” elaborado en 1996 por Louis Joinet establece que “los miembros de la Comisión deben estar investidos de inmunidad a efectos de no poder ser perseguidos por delitos de difamación”, lo que resulta, a su vez, consistente con la práctica de otras comisiones alrededor del mundo. Son, en total, cuatro críticas que no se sostienen.
De acuerdo en 3 de 4, Xavier.
ResponderEliminarNo considero que sea absurdo cuestionar el nivel de imparcialidad de los comisionados antes de presentar cualquier informe (aunque ya se han presentado dos). Es una sospecha perfectamente válida, considerando los antecedentas de algunos de ellos, y convengamos en que los antecedentes de las personas bien sirven para analizar su real capacidad para desempeñar una labor cualquiera. Como ejemplo tenemos el caso de Restrepo (afectado directo del terrorismo de estado) y Elsi Monge (colaboradora cercana de AVC que incluso participó de robos a bancos).
Esto no significa que con seguridad van a obrar mal o con dolo o revanchismo. Pero sus antecedentes valen a la hora de revisar el informe final.
Sobre las otras tres críticas no hay mucho que agregar a lo que tú has escrito. Sí vale decir que la ya repetida frase de "se justifican (la tortura y crímenes de estado) porque en Ecuador se estaba instaurando el terrorismo" es una torpeza que no se sostiene sobre ningún argumento certero.
Exelente articulo, que pena que los supuesto guardianes de la democracia no tengan oidos para oir ni ojos ni tiempo para leer.
ResponderEliminarEste anàlisis convierte en vìctima a la verdad, y sòlo me concentro en la parte donde dice "que los miembros de la Comisiòn...deben ser de intachable condiciòn moral"., y Don Xavier Flores asegura que ese es el caso de los cuatro miembros que lo integran. Esa distinciòn para el caso de la ex Monja Elsa Monge no es justa ni correcta, basta recordar o leer un poco mas los hechos delictivos que sucedieron alla por los años 80, cuando la policìa la vinculò en la participaciòn de asalto al Banco de la Producciòn en Quito (1986), por el asalto a la imprenta de la Univ. Catòlica y en el año 2004 a Doña Elsie la vida le regalò un muerto, cuando su "compañera de fe" muere atropellada en su vehìculo mientras ella se bajaba al garage de su casa, por lo cual fue recluida en un calabozo. Esta mujer, no tiene calidad moral para liderar una comisiòn de la verdad, vencida por todos sus pecados y por que ante la opiniòn pùblica se conoce de su pasado "frondoso" judicial. No hay que ser necio con la verdad, mi estimado Don Xavier. Pd: y de Restrepo, ..tambièn tiene su historia! Por favor.
ResponderEliminarGracias Xavier por regalarnos tanta claridad y verdad en tus escritos. Creo que esas críticas sí se sotienen -las "sostienen" los dueños de intereses que se ven afectados por las mismas. Después dicen que los medios "se autoregulan"...¡bah! Al menos tenemos una luz de esperanza y esperamos que tanto pasado oscuro no quede en la impunidad y que nuestras generaciones no olvidemos que lo que ocurrió cuando éramos niños, sino que sepamos lo que ocurrió. Es triste cuando me doy cuenta que nuestras generaciones crecieron sin conocer todo lo terrible que puede ser un sistema con violaciones sistemáticas de los derechos humanos, bajo el pretexto de "un bien mayor".
ResponderEliminarLa segunda refutacion realizada demuestra carencia de conceptos basicos de teoria general del proceso. La recusacion, para citar un ejemplo, es una institucion que opera desde el inicio de cualquier proceso, justamente por fundados temores de parcialidad del juzgador. Decir que Restrepo y Elsie Monge van a ser imparciales es como decir esperemos que los tribunales castristas juzguen a los disidentes para saber recien si son imparciales, es como en un juicio civil saber de antemano que el juez es accionista de la empresa demandante y esperar la medida cautelar congelando las cuentas para recien recusarlo. La segunda refutacion no sirve. La cuarta refutacion debe ser desarrollada, es penoso recurrir al argumento de autoridad (nunca se equivocan los organismos internacionales?), por que si se dice la verdad debo tener inmunidad? No es un requisito de toda democracia la transparencia y la responsabilidad individual? Ah es que lo dice fulano de tal, no, no sirve, porque!! No tengo tildes...sorry
ResponderEliminaralberto franco
Xavier, soy docente universitario, razón por la cual he buscado en la red tu entrevista sobre LA LEY DE COMUNICACIÓN, publicada en Diario El Comercio, el domingp 13 de diciembre último pasado, primera sección, segunda página, con la finalidad de demostrar la poderación y el conocimiento del tema para el género de la Entrevista.
ResponderEliminarExtrañamente El Comercio, no subió dicha entrevista en ELCOMERCIO.COM
AGRADECERÉ LA DEFERENCIA EN EL ENVIO YA SEA A LA RED DE PERIODISTAS DEL ECUADOR o a Luis Espinosa Rojas, luiher2@yahoo.es
j., no es un dato irrelevante, pero tampoco definitivo. En el caso concreto, no observo que ser familiar de una víctima del terrorismo de Estado o haber defendido los derechos humanos (lo de la participación de Elsie Monge en robos a bancos es un rumor para el que no conozco ninguna prueba) afecte la imparcialidad en los términos en que algunos lo suponen. Volveré sobre este tema más adelante. Y sí, la “repetida frase” es impresentable.
ResponderEliminarEMdW, gracias.
CB, insisto con la idea anterior: descalificar por rumores o por un accidente trágico es bastante pobre como análisis. Insinuar algo sobre Pedro Restrepo sin mencionar algo concreto es lamentable. Y de lo que has dicho a afirmar que mi artículo “convierte en víctima a la verdad”, jaja. Saludos.
bf, gracias y ojalá.
AF, la segunda refutación no puede demostrar lo que dices porque no se trata de un proceso (!?). Por cierto, comparar dos personas vinculadas a los derechos humanos con tribunales castristas… (WTF?). En materia de imparcialidad, no basta solo presumirla sino establecerla con evidencias y salvo rumores y generalizaciones, no observo que éstas se hayan presentado al debate.
Sobre la cuarta refutación, tienes razón, recurrir al argumento de autoridad es insuficiente. El espacio no fue suficiente para profundizar el asunto y lo que quise enfatizar en lo que escribí es que, a diferencia de lo que alguna gente sugirió en estos días, ese acto de otorgar inmunidad no constituye un privilegio excepcional, sino la práctica habitual para estas comisiones. Lo importante, en todo caso, es analizar la razón de esa práctica habitual y no es difícil encontrarla en la necesidad de que las personas que realizan investigaciones de esta índole tengan la garantía suficiente de que el fruto de sus investigaciones (que necesariamente causará polémica) no les acarreará problemas ulteriores. Saludos.
ler, trataré de conseguirlo y enviárselo. Gracias. Saludos.
Comparar a defensores de los derechos humanos con tribunales castristas no es tan descabellado, dado que por lo general son personas que solo juzgan en función de la ideología, un poco de iniciativa basta para comprender la analogía. El tema de la imparcialidad no se limita solo a un proceso, es tema básico de toda institución democrática, en una licitación el que califica no debe estar emparentado con ningún proponente, en un proceso penal el juez no debe ser pariente de la víctima, y en una comisión de la verdad, los comisionados no deberían tener afectaciones sobre los hechos que van a revisar. De verdad vamos a creer que Restrepo va a ser imparcial? De verdad nos ciega tanto la adhesión a este gobierno para pensar que la Monge va a ser imparcial?
ResponderEliminarAlberto Franco
AF, me permito responderte con cita de tus propias palabras: “Comparar a defensores de los derechos humanos no es tan descabellado”, al menos, no lo es tanto como asumir el absurdo que quienes defienden derechos humanos “solo juzgan en función de la ideología”. Concuerdo contigo en que la imparcialidad es básica, pero probar su falta no se lo hace con enunciados débiles, ni con prejuicios. Me permito introducir una pequeña variación en otra cita “De verdad vamos a creer que Restrepo NO va a ser imparcial? De verdad nos ciega tanto la NO adhesión a este gobierna para pensar que la Monge NO va a ser imparcial”. Porque si eso es lo que vas a pensar (tienes todo el derecho a hacerlo) te sugiero que lo pienses con elementos distintos (digamos, con argumentos) a tus prejuicios.
ResponderEliminarEn adición, te hago notar dos cosas: 1) a manera de precisión conceptual, la comisión de la verdad no tiene la misión de “juzgar” a alguien, sino de buscar información sobre hechos concretos y sistematizarlos. No atribuye responsabilidades individuales, esa función le corresponde a los jueces; 2) no deberíamos abstraernos del contexto en que surge esta comisión de la verdad. No parece posible que una composición plural (como por ejemplo la que tuvo la comisión chilena), con gente del gobierno de Febres-Cordero o de la policía, haya sido posible. (Nuestro caso es similar, en este sentido, al caso argentino). Pero esa aparente imposibilidad no debería (como no lo hizo) evitar que una comisión investigue y sirve para discutir los hechos de ese período oscuro. Saludos.
Esa es la clave del debate, la comision de la verdad no tiene la potestad de juzgar, solo de recojer informacion sobre hechos concretos, entre ellos el senor Restrepo quien enter lo mas importante:
ResponderEliminar1.- Yo no lo veo parcializado, lo veo simplemente como un padre con la necesidad de saber que paso con sus hijos, que ahora gracias al abuso del estado ya no estan, nunca mas.
2.- Es mas, creo que no hay persona mas exacta para descubrir la verdad, mientras mas pronto descubramos la verdad sobre esos pasajes oscuros (Restrepo, Consulelo Venavidez, Roldos, entre otros), mas nos alejaremos del trecer mundismo en el cual vivimos.
Nada tiene que ver con afinidad a este gobierno, si un gobierno (de izquierda o derecha)tine el noble sentimiento de buscar la verdad, lo minimo que deberiamos hacer es apoyar la propuesta, mas alla de ideologias, mas alla del partidismo politico, mas alla de nuestras ideas, siempre la verdad sera aun roca firme, necesaria para que una nacion no cometa los mismos errores. Si no aclaramos el asunto hoy manana puede ser tarde y ese fantasma puede rodear a nuestra familia o a personas queridas.