El "stand" de Guayaquil

28 de octubre de 2016


En un acto de honestidad brutal, el Municipio de Guayaquil advirtió a la ciudadanía que no participaría en la Conferencia Hábitat III. Por supuesto, esto no puede sorprender a nadie: el Municipio de Guayaquil no tiene nada que aportar en una reunión en la que se discute el desarrollo urbano planificado y sustentable.

Da ternura el sutil encubrimiento de diario El universo: "El gobierno municipal" es un término que este matutino jamás usa para referirse al Municipio de Guayaquil. 
 
Dada la insondable mediocridad del periodismo guayaquileño, el alcalde Jaime Nebot pudo salir al paso de esta ausencia con una afirmación tan vacía como ésta:

Guayaquil es un "stand", pero sobre la falta de planificación en beneficio de una argolla empresarial.
   
Digo que esta es una afirmación vacía, pues en materia de desarrollo urbano Guayaquil no tiene mayor cosa de la que enorgullecerse como para andarla mostrando en un “stand”. De hecho, hay razones suficientes como para pensar que Guayaquil podría mostrar un “stand”, pero de sostenidos fracasos: Guayaquil registra graves problemas de control ambiental (la putrefacción del Estero Salado, la contaminación del río Daule) así como graves problemas de exclusión social (el trato a los comerciantes autónomos y la decisión de excluir a una porción de la población de la ciudad de las obras y servicios del Municipio son ejemplos de ello); su sistema de transportación pública, a cargo de una fundación y de consorcios de transportistas privados, ha fracasado (juzgado de acuerdo con su propia planificación) y la prestación de los servicios públicos (con sus esquemas privatizados) es ineficaz. El alcantarillado, por ejemplo, a cargo de la empresa privada Interagua, puede “llegar a aumentar en seis (6) veces los costos” por contraste a alternativas propias “de ciudades verdes, inclusivas y sustentables” (así, el sistema escogido por el Municipio es ineficaz y el Municipio lo sabe, pues él mismo encargó este estudio) (1). La recolección de la basura, a cargo de la empresa privada Puerto Limpio, ni recicla, ni tampoco atiende a sectores marginales de la población a los que no les resulta rentable prestarles el servicio (pues es un servicio público sujeto a la rentabilidad privada) (2).

Lo más grave, sin embargo, es la represión a las libertades civiles, la cooptación de la participación ciudadana, la creación de un ciudadano “turista” de su propia ciudad (3) y de una ciudad en la que las personas “tienen un contacto casi nulo con personas de otras clases sociales” (4) y, en particular, la implementación de un modelo de desarrollo sin planificación y orientado a beneficiar a grupos de interés económico (en especial, los relacionados con el sector de la construcción, al que se perteneció el mismo alcalde Nebot) cuyo resultado ha sido una ciudad inequitativa, estancada en su economía y sin verdaderas áreas verdes ni espacios públicos (5). Exactamente todo lo contrario de lo que se mostraba en los “stands” de Hábitat III.

De esta manera, en casi un cuarto de siglo de la administración del PSC en Guayaquil no sólo que no se han sido resueltos la mayoría de los graves problemas de la ciudad que ellos recibieron el año 1992, sino que muchos de ellos han sido agravados.

Guayaquil es un vivo ejemplo que sin planificación y sin una orientación al bien común, las ciudades reman en dulce de leche.

(1) Mejía Betancourt, Abel, Morelli Tucci, Carlos Eduardo, Bertoni, Juan Carlos & Gabriel Cabezas Vélez 2013, 'La inundación de Guayaquil en marzo 2013. Opinión de expertos internacionales, Cooperación Técnica de CAF', Informe Gerencial [17 de junio de 2013], p. 32.
(2) Sobre los problemas ambientales, v. ‘Señales medioambientales del subdesarrollo en Guayaquil’, Xavier Flores Aguirre, 5 de junio de 2016; sobre la exclusión social, v. ‘Extrema y persistente desigualdad en Guayaquil’; sobre el fracaso de la Metrovía, v. ‘Novedades en la Metrovía (aplausos en el Titanic)’, Xavier Flores Aguirre, 25 de agosto de 2016; sobre las deficiencias de la gestión municipal, v. ‘La ciudad peregrina y gris que se fundó el 15 de agosto’, Xavier Flores Aguirre, 15 de agosto de 2016.
(3) Dos textos fundamentales de X. Andrade para entender Guayaquil: ‘Guayaquil: renovación urbana y aniquilación del espacio público’ y ‘Diario de Guayaquil: Ciudad privatizada’.
(4) Esta apreciación le pertenece al geógrafo David Harvey: ‘David Harvey y la vía a Samborondón’, Xavier Flores Aguirre, 13 de diciembre de 2015.
(5) Explicando el negocio de la Alcaldía socialcristiana’, Xavier Flores Aguirre, 4 de abril de 2016.

1 comentarios:

Natalia Roca dijo...

Muy acertado Xavier. Sólo además, (como para ilustrar la cómica causa) agregaría el tema de la absoluta represión a las maneras de arte libre. La esquematizacion y prohibición de las expresiones artísticas espontáneas. La megalomanía de querer todo bajo control como si fuera su casa de muñecas. Jugandola desde su isla.
La incesante marcada de territorio con sus "obras, públicas", más aún ahora en elecciones.
Los $400000 que se destinan a publicidad del Municipio cada mes. Pero ninguna sola campaña masiva de educación ambiental ha sido financiada; por poner un ejemplo.
Y mi favorito personal: El hecho de que en Gye se permite tener moteles legalmente y con todos los usos de suelo de la ley. Al mismo tiempo que no existe la figura centro cultural dentro del uso de suelo de la ciudad. Y no es que nadie lo haya intentado! Conveniente y cómico; comento.