Nebot, después de su discurso

10 de octubre de 2019


Si el exalcalde Nebot, antes de la marcha, estaba jodido, su discurso de este 9 de octubre lo jodió aún más.

Hay que decir que el exalcalde empezó bien, pues quiso encuadrar la acción de Guayaquil (donde tiene sus “pies”) como una acción en pro del Ecuador (donde está su “corazón”). Era lo lógico si quería vender su ideología de la prosperidad desde esta tarima octubrina.

Pero enseguida empezó a trastabillar. Dijo que se había dicho a sí mismo: “¿Qué fiesta hicieron los de Fragua de Vulcano? ¿qué baile hicieron? ¡Ninguno!”

Esto es pura ignorancia de Nebot. En el relato de José María Villamil, uno de los partícipes en la gesta de octubre de 1820, él claramente recuerda: “El Domingo primero de Octubre de 1820, me hallaba de visita a la digna familia del Tesorero D. Pedro Morlás. Separado de los demás, conversaba con el Tesorero. La niña de quien he hablado dijo: ‘-Será posible que no bailemos esta noche?’ ‘Tú no piensas más que en baile, dijo la madre con tierna severidad’. Y resulta que tras la petición de esta mozalbeta se organizó una fiesta en la casa de Villamil para que ella baile (esta hija del Tesorero se llamó Isabel Morlás y tenía entonces trece años –después se casó con el prócer León de Febres-Cordero y se fue a vivir con él a Venezuela). Y esta fiesta, contrario a lo supuesto por Nebot, fue lo que la historia ha recogido con el nombre de “Fragua de Vulcano”. Tiene hasta un monumento al frente del Municipio. 

De aquí en más, el exalcalde Nebot no pasó de decir generalidades: afirmó que este 9 de octubre era una oportunidad para “mantener la libertad de Guayaquil y del Ecuador” y que en Guayaquil “defendemos lo que tenemos que defender en contra de lo que ofende todo lo que yo he mencionado” (?). Se puso también punitivo, su estado natural: afirmó que a los luchadores de Guayaquil les tocaba “reemplazar al Estado y castigarlos como se los tiene que castigar” y que Guayaquil también podía ser la del “puño cerrado, capaz de golpear en el pecho mortalmente a quien ofende a la ciudad de Guayaquil”.

¿A quién le quería pegar, Nebot? A unos enemigos de fantasía, a los que “son malos por su actitud delictiva, y aquí los vamos a castigar, aquí no tenemos ese tipo de gente” (?). Aquí esto ya no hace sentido: ¿en Guayaquil no hay gente con “actitud delictiva”? ¿En qué planeta vive Nebot?

Luego afirmó: “Aquí no tendrán cabida nunca, no tendrán éxito nunca, los que no tienen normas claras de respeto a la convivencia civilizada, esa es la posición de Guayaquil, y que no nos busquen, porque nos encuentran”. La única conclusión posible es que en el Planeta Mocolí, la droga es barata. Es la única explicación para este divague psicodélico que sugiere que en Guayaquil quien no respeta “normas claras de respeto a la convivencia” no ha tenido cabida nunca… cuando el no respeto a las normas de convivencia es el modus operandi de los guayacos cuando conducimos nuestros vehículos (Mahuad lo explica), y en general, es cómo nos comportamos en esta tierra de sabidoshhh. Y si el exalcalde Nebot no se ha enterado de esto, es porque está alucinando.

Increíblemente, vino más mumbo-jumbo: “Siempre hemos estado preparados, primero la ley, primero la ley, y después, la ley del pueblo” (?), y luego, la más hermosa de sus vaguedades: “hay que hacer la guerra para conseguir la paz, la paz vendrá cuando derrotemos a quienes nos quitan la paz” (?).

Probablemente, el último poncho.

Y luego de todo este divague de Nebot, llegó su cierre con una mención a la ideología de la prosperidad y a un partido por sobre todos los partidos: “construyamos juntos el Ecuador que merecemos y que queremos, que Dios bendiga a los ecuatorianos, pero que los ecuatorianos sepamos que a Dios le toca bendecir al Ecuador y a nosotros juntos salvar nuestra Patria, salvar al Ecuador, un abrazo cariñoso para siempre, un abrazo en la lucha, un abrazo en la ideología de la prosperidad y en el partido del Ecuador, sobre todas las ideologías y sobre todos los partidos. Gracias a ustedes”. Cuando terminó su discurso, sus muecas de disgusto transmitieron clarito su verdadero mensaje: “La he cagado. Tiré una buena oportunidad a la marchanta”.

El curtido Nebot de la política sabe bien que le fue mal: no pasó de decir vaguedades, de hacer acusaciones sin destinatario, de evocar vanas ilusiones. Si desde esta tarima quiso vender su ideología de la prosperidad, pues no convenció a nadie de ello. Y en el proceso (v. “Nebot, antes de la marcha”) se hizo de unos cuantos enemigos que habría preferido evitar.

Mala tos, Alcalde James de la Mofle. La Presidencia parece ya un lugar lejano.

7 comentarios:

Jimmy Cumbicos dijo...

Casi en todo de acuerdo menos en "cuando el no respeto a las normas de convivencia es el modus operandi de los guayacos cuando conducimos nuestros vehículos"

Cristhian Menèndez dijo...

Era cuestión de tiempo, el solo se quitó la máscara, y si antes tenía difícil alcanzar un 15% de aprobación para su llegada a la presidencia, con esto creo que si llega a 9% de aprobación en todo el Ecuador seria por los habitantes de su querida ciudad e influencia de los empresaurios.. Pienso que Nebot no necesitó de una ley inconstitucional para quedar como un muerto político.

Unknown dijo...

Muy buen comentario. La presidencia la tiene cerca solo cuando la sueña.

Unknown dijo...

Lo que le puedo decir a este prepotente es que el mismo cabo su propia tumba, porque presidente del Ecuador jamás va a ser, podrá ser presidente de los roba burros en Guayaquil si, pero del Ecuador no

Anónimo dijo...

Qué buen diagnostico sobre éste prepotente que siemore habla de la prosperidad de Guayaquil. Pero éste oligarca de medio pelo,que gracias a su padre pillo que robó a diestra y siniestra en todos los gobiernos de Velasco Ibarra que decía que era su tio; este habil licenciado, que todos le.conocían como un pobrete y que luego apareció con grandes propiedades, éste libanés que ordena a que los indígenas vayan a cuidar los PÁRAMOS, después que éste HIPÓCRITA estuviera 3n las comunidades poniéndose el poncho, sólo cosechará lo que ha sembrado ODIO. Éste fascista c9mi dicen en anteriores comentarios: CABO SU PROPIA TUMBA.
Habla de prosperidad, algún día habrá visitado los barrios como la prosperina, monte sinaí, los suburbios e. Do de se refleja otra realidad de Guayaquil que nunca atendió en los 20 años de ser alcalde de Guayaquil?
Si se sube por las gradas al cerro Santa Ana, y por los portones ve su entorno son casa destartaladas de caña, vemos que el Guayaquil próspero es sólo una burbuja y el resto ee.la ciudad sigue siendo como antes de su alcaldía. No hay que negar que tod9 esta prosperidad de Guayaquil, se debe a las fundaciones ee sus amigos que s9n quienes administran los dineros de los ingresos de los contribuyentes que son quienes en realidad son los beneficiaros.
Éste libanés, se atreve a botar de Guayaquil a los indios que son los pueblos originarios de nuestro país.
Su discurso xenofobista no es más que el reflejo de su personalidad de un oligarca autoritario, digno alumno del sanguinario Febres Cordero.

Anónimo dijo...

Cierto! Es la forma de manejar, el respeto en la fila, la atención al cliente, el respeto al empleado, el respeto al vecino con el volumen, el respeto al medio ambiente, etc, etc...

Wachito dijo...

Siempre lo he dicho este nunca será presidente del Ecuador
Peor con el apoyo del traidor hipócrita de lenin que nadie lo quiere por mal gobernante.