El director de ONU
Hábitat, Joan Clos, explica en esta entrevista a diario El Tiempo de Bogotá lo
que está mal en el crecimiento de las ciudades (1). Y, de manera nada sorprendente, es como hacer un CHECK LIST de las deficiencias de la administración socialcristiana en
Guayaquil:
Una Metrópolis tropical cuyo crecimiento arrastra tres desastres urbanos. |
1. PLANEACIÓN A FAVOR DE UN GRUPO DE INTERÉS.
“[El diseño urbano] es levantar el plano, hacer las calles, decir cómo un
cruce resuelve los problemas. Tiene que ver con el diseño del espacio público y
el diseño de las parcelas edificables, y la relación entre ambos. La
planeación se le ha entregado al mercado inmobiliario, y ellos no tienen por
qué saber sobre vías públicas porque es un servicio colectivo y no de un
proyecto urbanístico. Se les delega a ellos por incapacidad del Estado”.
Como lo han puesto en
evidencia los pocos urbanistas que se han preocupado de discutir a Guayaquil en
profundidad, la planeación en Guayaquil está en manos del mercado inmobiliario.
Para John Dunn, el Municipio se limita “a la simple aprobación de proyectos y
construcciones” sin dar “las directrices de crecimiento de la ciudad e
implementar una serie de objetivos que permitan medir el crecimiento urbano y
la calidad del mismo”. Eduardo McIntosh es aún más rotundo: “Es fácil notar la
confusión en el rol que el departamento de planeamiento urbano de Guayaquil
debe tener. En lugar de dictar la política de crecimiento a seguir y de
coordinar los esfuerzos de los promotores inmobiliarios para maximizar la
calidad de sus ofertas, se piensa que el rol del departamento de planeamiento
urbano es el de autorizar permisos de construcción y apenas relatar lo que
sucede. Es sencillo entender la manera caótica en la cual la ciudad ha venido
creciendo" (2).
CHECK
2. CRECIMIENTO DE MANCHA URBANA.
“Lo que
estamos diciendo como Naciones Unidas es que, desde el punto de vista de la
política urbana, hay que volver a poner la vivienda en el centro de las urbes.
Y esto se puede conseguir si lo persigues y lo consideras. Desde el punto de
vista funcional y financiero, es lo más eficaz y lo más productivo. La
construcción en la periferia tiene como consecuencia que la ‘mancha urbana’
crece, y la dispersión disminuye la productividad de las urbes. Aparte de
que el costo de los servicios per cápita es más alto, la productividad de la
economía es más baja”.
El hecho de que un
economista como Walter Spurrier (no sospechoso de afinidad alguna con el
gobierno central) afirme que Guayaquil "creció menos que el resto del país" y que "nuestra ciudad ya no es imán de la migración interna y externa" encuentra una explicación en la forma en la que se ha
construido Guayaquil (3). Pero como se demostró en el punto anterior, la
“planeación se le ha entregado al mercado inmobiliario” y son ellos la facción
ganadora de esta forma de construir, y aunque termine por perjudicar a la ciudad como un todo, ningún cambio puede esperarse bajo el imperio del PSC.
CHECK
3. CRECIMIENTO SEGMENTADO.
“A nivel
teórico, la respuesta es siempre la misma: que hay que mezclar a toda la
población. Precisamente, la capacidad de innovación y creación de la ciudad
proviene no de la separación de grupos, sino de la mezcla de grupos. Este es el
ideal. Hay que ver cómo se gestiona en la práctica”.
En la práctica, en
Guayaquil el norte es la burbuja. La derrota de una ciudad sucede cuando, como
ha pasado con Guayaquil, el aislarse de los demás se convierte en una aspiración
común.
CHECK
(1)
María Teresa Santos & Ernesto Cortés F., ‘“Sin ley, la urbanización es un desastre”: Joan Clos’, Diario El Tiempo, 16 de octubre de 2016.
(2)
‘Explicando el negocio de la Alcaldía socialcristiana’, Xavier Flores Aguirre,
4 de abril de 2016.
(3)
Walter Spurrier Baquerizo, ‘Guayaquil se rezaga’, Diario El Universo, 22 de
febrero de 2015.