Diario El Universo publicó una entrevista al Alcalde
de Guayaquil sobre temas de tránsito, este 25 de julio (1). El periodista intervino diez veces, casi la mitad de ellas por
la Metrovía.
El resultado de este intercambio es un
empobrecimiento de la esfera pública. Veámoslo en cuatro episodios, un bonus
track y una concisa conclusión.
1) LA ENTREVISTA
[fragmento sobre la Metrovía]
Primera:
“Se viene la cuarta troncal de la Metrovía”.
Esto fue, en realidad, un pie de amigo que solo
mereció una respuesta seca por parte del Alcalde de Guayaquil: “La que sale del
Batallón del Suburbio hacia el centro de la ciudad”.
Segundo: “Guayaquil se queda exclusivamente con el
servicio de Metrovía o se piensa en otro servicio, los buses biarticulados...”
Una pregunta tímida que mereció como respuesta, en resumen, que el
sistema de transporte “tiene que ser el que el pueblo pueda pagar”.
Tercero: “Pero
en la aerovía se tiene que pagar más”
Este es un comentario con adversativo, que recibió
una respuesta hermosa: “Sí, pero es selectivo. Si usted quiere paga más, si no
usa el bus convencional...”.
Cuarto: “¿Qué
troncal traerá los buses biarticulados?”
Una pregunta por información, con respuesta concisa:
“La troncal 1, porque ya terminaron de pagar sus buses”.
Quinto: “Eso
permitiría mejorar el servicio, calmar las quejas”.
Una pregunta que implícitamente reconoce el malestar
con el funcionamiento del servicio de la Metrovía. Frente a esto, el Alcalde
señala como una mejora los “buses con sistema de aire acondicionado optativo” y
un clásico de su discurso: “¿de dónde venimos?”, de chatarras humeantes,
peligrosas, sin revisión y sin aire acondicionado”.
2) EL PERIODISTA
(2)
El periodista hizo preguntas como se escriben líneas
en los telegramas. Nunca elaboró sus ideas, como si no tuviera permiso para
ello. Él conoce que existe un malestar en la ciudad, pues admite (en la última
pregunta) que hay que hacer “mejoras” en la Metrovía, que hay que “calmar” las
quejas de los usuarios. Pero procede con cautela, sin mencionar las fallas, sin
contextualizar los hechos, sin confrontar las ideas del Alcalde con la
realidad.
Es un periodista que se ha resignado a no serlo, al
menos cuando entrevista al Alcalde.
3) EL ALCALDE
Canchero. Sabe que va a jugar con sus mascotas.
4) EL CIUDADANO
El verdadero perdedor de esta entrevista. Nunca
recibe información contextualizada sobre la Metrovía: queda ignorante que la
troncal que “se viene” debió haber estado terminada el año 2008, según la planificación
municipal (¡son 9 fucking años de atraso!). Nunca recibe información
sobre los límites del “sistema” escogido: en Guayaquil se está pagando la
tarifa de transporte más alta del país (30 centavos) pero el servicio es
todavía notoriamente deficiente. Y tiene que soportar, además, la burla de que
ahora le ofrezcan como mejora el “aire acondicionado optativo”, cuando antes el
Alcalde decía que no se lo tenía en la Metrovía porque los usuarios se podían enfermar.
5) BONUS TRACK
“¿Cómo evalúa el tránsito
en la ciudad?”
Esta fue la primera pregunta de la entrevista.
La respuesta del Alcalde a esta pregunta es de
fábula: “heredamos un problema de 60 años”. Que un funcionario que tiene más de
la cuarta parte de esos 60 años en el poder (17 años) te diga que ha “heredado”
un problema, demuestra el asombroso nivel de impunidad de su retórica. El
periodista es de palo.
6) CONCLUSIÓN
Pierde el ciudadano, pero gana la Alcaldía. Business as usual en diario El Universo.
*
(2) Diario El
Universo no consigna el nombre del periodista que entrevista a la máxima
autoridad de su ciudad (al menos en la versión digital), acaso para salvarlo
del bochorno. Si es así, qué gentiles.