Patria

12 de septiembre de 2025

            Publicado en diario Expreso el viernes 12 de septiembre de 2025.

La Junta Central Suprema y Gubernativa del Reino se constituyó el 25 de septiembre de 1808 en Aranjuez. Durante la ocupación francesa de España (período entre 1808 y 1814 conocido en España como la “guerra de independencia española” o “guerra del francés”) fue un órgano que ejerció los poderes ejecutivo y legislativo del Reino de España, en representación del rey Fernando VII, un paleto cautivo en Valençay.

Esta Junta Central del Reino convocó a elecciones por real orden del 22 de enero de 1809, en un proceso que abarcó a toda la América hispana y a las Filipinas. En la real orden se dispuso que nombren “los virreinatos de Nueva España, el Perú, Nuevo Reino de Granada y Buenos Aires, y las capitanías generales independientes de la isla de Cuba, Puerto Rico, Guatemala, Chile, provincias de Venezuela y Filipinas, un individuo cada cual que represente su respectivo distrito”. Por tratarse de unas audiencias subordinadas (por ende, inferiores en la jerarquía) ni la Audiencia de Charcas ni la Audiencia de Quito nombraban un representante.

Por esta exclusión en la representación, el historiador Jaime E. Rodríguez O. razonó: “No sorprende, en consecuencia, que en 1809, aun cuando se encontraban en proceso de elegir a sus representantes a la Junta Central, estallaran a lo largo del continente una serie de movimientos a favor de la autonomía, dirigidos por la élite y grupos de profesionistas. Los primeros movimientos se produjeron en los dos reinos sudamericanos a los que no se había otorgado representación individual ante la Junta Central: la Audiencia de Charcas, en mayo y julio; y la Audiencia de Quito, el 10 de agosto de 1809”.   

Por querer ser y parecer, la Junta de Quito en el acta del 10 de agosto afirmó que el suyo era un gobierno interino “a nombre, y como representante de nuestro legítimo soberano, el señor Don Fernando Séptimo”. Así, Quito buscó ser parte de una defensa unánime del Reino y es por esto que en la “Proclama a los pueblos de América” suscrita el 16 de agosto por Manuel Rodríguez de Quiroga (a la sazón, el Ministro de Gracia y Justicia de la Junta), este forastero (altoperuano) afincado en Quito instó a los demás pueblos de la América hispana a conspirar “unánimemente al individuo objeto de morir por Dios, por el Rey y la patria. Esta es nuestra divisa, esta será también la gloriosa herencia que dejemos a nuestra posteridad”. 

En el movimiento de agosto de 1809 en Quito no se buscó la independencia del Reino de España. Se postuló, eso sí, una defensa apasionada del Reino de España frente a la invasión de los franceses en la Península y el cautiverio de su rey en territorio francés. Y lo que sí se buscó en agosto de 1809 fue romper la sujeción de Quito al Virreinato de Nueva Granada y empezar a administrar de manera autónoma su territorio, pero siempre como parte integrante del Reino de España.   

Rodríguez de Quiroga no invocó la divisa de “morir por Dios, por el rey y la patria” para colocarse una máscara (cuyo resultado no querido es que unos patriotas luzcan como unos hipócritas) sino por la honda hispanidad de Quito, que salió en defensa de una idea de patria que el año 1809 abarcaba también a la Península y la América hispana. 

Las parroquias urbanas de Guayaquil

5 de septiembre de 2025

            Publicado en diario Expreso el viernes 5 de septiembre de 2025.

El año 1889 el Concejo Municipal de Guayaquil aprobó la división administrativa de la ciudad en cinco parroquias urbanas: Carbo, Bolívar, Rocafuerte, Olmedo y Ayacucho, ordenadas de Norte a Sur. El límite Norte de la parroquia Carbo era Las Peñas, mientras que el límite Sur de la parroquia Ayacucho era donde terminara la trama urbana de la ciudad, que por aquel entonces era alrededor de la calle Portete. De acuerdo con los estudios de Michael Hamerly, hacia 1890 Guayaquil había superado a Quito en población y se había convertido en la ciudad con el mayor número de habitantes del Ecuador (convirtiendo al Ecuador en una anomalía latinoamericana, donde su capital no es la ciudad más poblada). Se calcula que la habitaban alrededor de 45.000 personas.

En esta división administrativa de 1889, las parroquias de Guayaquil se dividieron por calles que las atravesaban de Este a Oeste. Carbo limitaba con Bolívar en la calle Bolívar (hoy, Junín); Bolívar limitaba con Rocafuerte en la calle Aguirre; Rocafuerte limitaba con Olmedo en la calle Colón; Olmedo limitaba con Ayacucho en la calle Ayacucho, y Ayacucho limitaba con el avance constante de la ciudad hacia el Sur. En 1930, esta expansión hacia el Sur motivó la creación por el Concejo Municipal de una nueva parroquia, Ximena, segregada de la parroquia Ayacucho. Hacia 1930, Guayaquil tenía alrededor de 120.000 habitantes.

Guayaquil continuó su expansión incesante. Para acompasar este crecimiento, en 1955, el Concejo Municipal de Guayaquil aprobó una nueva división en parroquias porque, como se dejó constancia en un considerando de la Ordenanza de creación de esta nueva división territorial, la división en seis parroquias “no se corresponde con el aumento de población que ha experimentado la ciudad desde que tal división fue creada”. Hacia 1955, Guayaquil tendría alrededor de unos 400.000 habitantes.  

En otro considerando de la Ordenanza se justificaba la creación de ocho nuevas parroquias (Roca, Tarqui, Nueve de Octubre, Sucre, Urdaneta, Febres-Cordero, Letamendi, García Moreno) y la nueva división del territorio de la ciudad “para facilitar el ejercicio de los derechos civiles y políticos de los ciudadanos y para la mejor administración de los intereses municipales”. Es decir, el propósito era utilizar la división territorial para la planificación de la ciudad.

Han pasado 70 años desde la aprobación de esta Ordenanza y Guayaquil siguió su incesante crecimiento (en 1991, sumó como parroquia urbana a Pascuales, la que desde 1893 era parroquia rural). Hoy continúa siendo la ciudad más poblada del Ecuador y según el censo del 2022, ese año la habitábamos 2.746.403 personas. Hoy debemos ser algunas decenas de miles más.

En estos 70 años, las parroquias situadas en la periferia de Guayaquil, esto es, Ximena, Febres-Cordero y Tarqui, y desde 1991 Pascuales, crecieron de forma excesiva en contraste a las parroquias centrales. Por ejemplo, Tarqui tiene más de 1.000.000 millón de habitantes, Rocafuerte tiene menos de 10.000. La división actual ya no sirve para la planificación del territorio. 

Por disposición legal, una nueva (necesaria) división de las parroquias urbanas de Guayaquil sólo podrá hacerse el año 2033.