“Hago constar aquí, para
el caso de mi fallecimiento, que desprecio a la nación alemana debido a su
exaltada estupidez y que me avergüenzo de pertenecer a ella”*.
Esto dijo Shopenhauer
sobre Alemania: ¿Qué le deja a uno, cuando de juzgar a un país tan disfuncional
como el Ecuador, se trata? ¿Quién puede estar orgulloso de que toda promesa de recuperación
de la institucionalidad resulte, invariablemente, un fraude? ¿Quién no puede
considerar como estúpido en grado sumo de exaltación que el Estado en el
Ecuador sea más un estorbo que un aliado?
*
Schopenhauer, Arthur, ‘El arte de
insultar’ [Die Kunst zu beleidigen],
Alianza editorial, Madrid, España, 2018 [Primera edición: 2005], p. 40.
(Edición e introducción de Franco Volpi.)
1 comentarios:
Sipues. No se.
Lo ultimo que se pierde es la esperanza? Jaja
Por lo menos no es Sudamerica como el continente del Africa.
Reportes de la Nikki Haley en la ONU decian quel tal boko haram (deletreo?) lanzaba mujeres contra fogatas, golpeaba a madres con los cuerpos de sus propios bebes (vivos, muertos? [no se cual seria peor]).
No somos tan efectivos como los gringos, ellos no son tan efectivos como los europeos nordicos o asiaticos del este...
Medio relativo, supongo.
Eclesiastés 9:11
Lo verdaderamente frustrante, supongo, es el potencial que se desperdicia.
Mientras hay vida...
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