Blanca Moncada, periodista
de diario Expreso, entrevistó a una doctora en arquitectura por la Escuela
Técnica de Arquitectura de Sevilla y codirectora del Máster Laboratorio de la
Vivienda del siglo XXI en la Universidad Politécnica de Cataluña, la argentina Zaida
Muxí Martínez. Como todo persona que conoce de urbanismo y que no se deja
vender gato por liebre, Muxí Martínez se dio cuenta enseguida que Guayaquil es
un desastre.
La entrevista se tituló: “Zaida Muxí Martínez: ‘Cuanto más dispersa, es más insegura una ciudad”.
1) Las críticas de Zaida Muxí Martínez a Guayaquil
* La
gran extensión de la ciudad y su dispersión.
* La
preeminencia absoluta del vehículo privado.
* La
falta de planificación.
* La
construcción de la ciudad orientada a la satisfacción del negocio inmobiliario.
* La
autoridad municipal no cuida del espacio público.
* El
malecón como un espacio recuperado para pasear a la manera de un centro
comercial. “Guayaquil se ha abierto al río, pero de manera falsa”.
* La
falsa sensación de seguridad por vivir en urbanizaciones cerradas.
* No
hay calidad de vida en las aceras, no hay sombras, no hay pasos de peatones.
* La
creación de urbanizaciones alrededor de una única vía de acceso (Samborondón,
Vía a la Costa).
2) Las soluciones de Zaida Muxí Martínez para
Guayaquil
* Controlar
la expansión de la ciudad.
* Recuperar
la planificación de la ciudad y tomar en cuenta la climatología y la
participación los ciudadanos para llevarla a cabo.
* Trabajar
en la igualdad social, la generación de oportunidades y la creación de variedad
que haga atractiva a la ciudad.
*
Comprar edificios vacíos en el centro, para habilitarlos y proponerlos para
vivienda de estudiantes, a la manera de lo hecho por la Universidad de las
Artes.
* El
comercio debe volver a las calles.
* Potenciar
el transporte público. Los peatones deben ser prioridad.
* Tener
una buena relación con la ría.
3) El modelo de desarrollo de la Alcaldía de
Guayaquil
El problema de fondo es el
modelo de desarrollo de Guayaquil. La Alcaldía de Guayaquil sabe, porque encargó
un informe a la Corporación Andina de Fomento (CAF), que el modelo de
desarrollo impuesto en Guayaquil es un desastre: “lotes pequeños para la sviviendas, aceras y accesos estrechos, limitadas áreas verdes, y en general un aclara tendencia hacia la impermeabilización del suelo urbano”.
Pero eso no es lo peor. Lo
peor, de acuerdo con los expertos de la CAF, es que el crecimiento de Guayaquil
cuesta alrededor de US$7 millones por kilómetro cuadrado, mientras que si se
utilizaran las iniciativas propias de una ciudad “verde, inclusiva y sustentable”, eso no solo que resultaría 6 veces más económico, sino que
además resultaría una alternativa más eficaz para el control de las
inundaciones que la alternativa de crecimiento que ha escogido la Alcaldía de
Guayaquil.
El mensaje es claro:
resulta contraproducente que la ciudad se expanda tanto, pero a su vez, esa
expansión beneficia al sector inmobiliario y de la construcción. La ciudad
invierte unas seis veces más de lo que invertiría para obtener un peor
resultado que el que obtendría con la aplicación de unas políticas amigables
con el ambiente y con los ciudadanos, como las que recomienda la CAF en su
informe:
“Guayaquil
ofrece condiciones inmejorables para desarrollar soluciones integradas en el
diseño urbano que combine programas de vivienda, transporte, agua potable,
alcantarillado, drenaje, residuos sólidos y medio ambiente [para] diseñar
soluciones sustentables en el largo plazo”.
Pero que el PSC aplique este
cambio es imposible. ¿La razón? Echaría a perder el negocio de las
inmobiliarias y las constructoras (los socios naturales de un Alcalde que salió
de entre sus filas).
En resumen: Guayaquil es
una ciudad de unos pocos avivatos y
unos muchos incautos (y ojo, escojo
mis palabras).
4) Conclusión
El hiato entre esto que
somos como ciudad y lo que debemos procurar hacer en Guayaquil es enorme. Y
mientras más tiempo esté el PSC en el poder, más lejos estaremos de cambiar de
rumbo. Porque el problema de fondo con el PSC es aquello (paradójicamente) de
lo que más se vanagloria hasta ahora: su modelo de desarrollo.
Esto, porque el modelo de
desarrollo aplicado por el PSC en Guayaquil te vende como una Disneylandia lo
que realmente funciona como el Play Land
Park. Y lo asombroso a estas alturas, realmente, es que haya tantos
incautos que no puedan hacer la diferencia.
1 comentarios:
Gracias, Xavi. Eres el mejor.
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