El traidor

9 de julio de 2019


No, no me refiero al ladino de Lenin Moreno.

Me refiero a algo más grave: a Julio César Trujillo, o mejor dicho, a su memoria de héroe.

Julio César Trujillo ha muerto, auto-prorrogado en sus excesos. Murió en su último abuso. Fue un digno “Notario Cabrera”. De la política, claro.

Pero lo que debe quedar cristalino es que Julio César Trujillo fue un traidor. No traicionó a una persona, fue mucho peor: traicionó a la voluntad popular.

Me explico: el pueblo decidió el 4 de febrero de 2018 en referéndum que se debía reformar la Constitución para otorgarse a sí mismo la facultad de elegir a sus representantes a una de las funciones del Estado (el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social) y que se debía crear un Consejo Transitorio que reemplace al Consejo cesado hasta que los elegidos por la voluntad popular (es decir, Tuárez y los demás, elegidos el 24 de marzo de este año) tomen asiento en la renovada institución. Esta fue la voluntad del pueblo.

El Consejo Transitorio presidido por Julio César Trujillo se tomó muy en serio a la “voluntad popular” en sus inicios: fue la base para erigir su edificio de abusos. Cuando como concepto le sirvió para acumular poder, la invocación a la “voluntad popular” que se había expresado a favor de la pregunta 3 y su Anexo en el referéndum del 4 de febrero de 2019 era su carta de triunfo. Armado de este concepto, el órgano de Trujillo creó una normativa que reemplazó a las normas constitucional e internacional aplicables (movida muy conveniente a fin de eximirse del cumplimiento de incluso los rudimentos del debido proceso: el órgano de Trujillo operó como una Kangaroo Court). También les sirvió para destituir a los “correístas” y para nombrar a dedo a los aliados en la “Transición” con la invención de los “encargados”. La “voluntad popular” les sirvió, en definitiva, para su contumaz arbitrariedad.

Pero la voluntad popular no es puro verso: tiene una manifestación real los días de elección popular. Y el invento de la integración de un Consejo de Participación Ciudadana y Control Social por la voluntad del pueblo, que parecía un juguete inofensivo con el que seducir al votante ecuatoriano en febrero de 2018, unos meses después amenazaba con convertirse en un grave obstáculo para sostener los cambios emprendidos por el desplazamiento de los “correístas” de los altos mandos del Gobierno, que fue el gran propósito de la existencia del Consejo Transitorio, ya en la práctica.

El problema era que una nueva manifestación real de la “voluntad popular” en marzo del 2019 podía muy bien resultar contraria a los intereses del Gobierno. Y así resultó.

Y aunque fuera la misma “voluntad popular” por la que se creó el órgano transitorio que él presidió, Julio César Trujillo decidió, después de haberse servido ya lo suficiente de ella, traicionar a la “voluntad popular”. Porque el pueblo decidió el 4 de febrero de 2018 que las autoridades del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (por reforma que propuso este mismo Gobierno) sean elegidas por la voluntad popular y se decidió el 24 de marzo de 2019 los que ahora son sus integrantes (es decir, Tuárez y los demás). Voluntad popular, le haya gustado a Trujillo o no.

Entonces, la traición: Julio César Trujillo decidió ponerse en contra de la decisión popular del 4 de febrero de 2018 a través de la promoción del voto nulo y de la eliminación del mismo órgano que él mismo presidió (valga decirlo, en su versión más arbitraria).

Es cristalino: Trujillo traicionó a la voluntad popular, pues un rato la exaltó como herramienta para atacar a sus “enemigos” políticos, pero luego la despreció cuando ya no le servía. Trujillo actuó como un atemporal canalla, con un claro sesgo anti-democrático.

Si esto es un héroe…

3 comentarios:

Unknown dijo...

Excelente! 👏👏👏

Tu Peor Pesadilla dijo...

Trujillo y sus secuaces son solo una muestra de cómo,por décadas,los polítiqueros actuaron en este pais;la palabra dedocracia era con la que se conceptualizó esta práctica de poner funcionarios públicos a ejercer cargos ; en un par de audios se escuchaba claramente al tristemente célebre león febres cordero y a jaime nebot, elegir los nombres de quienes ocuparían los cargos de "representación popular" pero que en realidad representaban solo a ese minúsculo 2% de nuestra sociedad(los acomodados), y que por décadas gobernaron éste y así en todos los paises subdesarrollados(al estilo de las épocas coloniales , donde gobernaban los vireyes en distintas localidades a favor de los reyes y por su puesto a su conveniencia . Fué la Revolución Ciudadana quien hizo una verdadera cirujía para acabar con esta dedocracia y dar a luz a la MERITOCRACIA , con la cual(luego de claras muestras de capacidad) se GANABAN su oportunidad , ahora si , de representar a ese 98% de la población , y que hizo saltar a los "acomodados" como nunca antes... En todo caso , este nuevo CPCCS tiene(aunque no están totalmente todos los que el pueblo realmente eligió a causa del comprobado fraude perpetrado por los que cogobiernan el pais junto al mamotreto de presidente que tenemos, pero por lo menos el pueblo tiene mayoría en ese grupo de 7 personas),la oportunidad de poner las cosas y a muchas persona en su lugar...!!

Unknown dijo...

Se debería comenzar con eliminar bla obligatoriedad del voto, por qué vale decirlo el votante promedio y aquí más no sabe ni lo que va a votar ni está medianamente informado de los temas de política pública